2016,
Título: Bittersweet
Año: 2016
ISBN: 978-84-16620-34-0
Páginas: 398
Precio: 16,90€
Fuera del instituto, Bambi tiene a Liam Tucker, un seductor que reside en un barrio marginal pero con alma sensible, en especial a la hora de escribir. Ambos se conocieron en un taller de escritura (del que dentro de la novela nunca han estado, supongo que en Bittersweet: The Beginning es donde muestra cómo estos dos personajes se conocieron) y ahora son grandes amigos, se muestran lo que han escrito, quedan de vez en cuando, piden opiniones el uno al otro acerca de cómo creen que pueden mejorar...
En casa, Bambi se siente abandonada por sus padres porque éstos tienen trabajos a los que dedican mucho tiempo. Marlene es la directora de una importante revista de moda, y a veces según cómo la describía Bambi, parecía un calco de Miranda Priestly en El diablo viste de Prada. El padre de Bambi es informático y está viajando constantemente de un lado a otro. Con la única que parece poder contar es con Berta, la divertida asistenta y consejera de Bambi, quien parece que hace las veces de madre, pero quien le dice a Bambi que debería darle una tregua a su madre y no juzgarla tanto.
La vida de Liam no es un camino de rosas: apenas tienen dinero con el que poder sobrevivir, su madre sufre violencia de género y su padre, aparte de pegarla y maltratarla psicológicamente, se gasta todo el dinero en prostitutas y alcohol. Liam, al no soportar ver que su madre pasa por esta miseria, decide meterse en un negocio tan oscuro que no sabe si saldrá bien parado.
He de decir que Bittersweet, como historia, me ha gustado, pero necesitaré comentar algunas cosas más adelante.
Como reza la sinopsis, pensé que los protagonistas cruzarían sus caminos en el propio taller de escritura, no que ya se conocían y ya son buenos amigos.
La autora quiere tocar muchos temas: bullying, marginalidad, violencia de género, otros problemas familiares... y algunos de ellos no siento que profundice demasiado, quitándoselos de en medio de un plumado, como si nada. Tampoco me gusta demasiado una cosa que hace la protagonista al final; imagino que en su caso lo hace por más miedo al bullying y al rechazo, pero aún así es traicionarse a sí misma, a su amiga Connie y a sus valores.
Sobre los personajes, he de decir que apenas he sentido nada por ninguno. Bambi no me ha llamado absolutamente nada la atención. Era una niña que no se consideraba pija pero era pija, que no sabe si quiere estudiar, pero lo único que quiere hacer es escribir. Liam era más auténtico que Bambi, aunque tampoco sabría decir algo que me guste de él, e incluso a veces me resultaba muy pesado con sus constantes comentarios salidos de tono. Connie estaba atrapada en sus miedos e inseguridades, era devastador como se sentía, pero tampoco me caló.
Sobre la ubicación geográfica de la trama, no sé aún nada, sólo se intuye que son angloparlantes y que viven en una ciudad grande porque tienen metro. En mi opinión, los mensajes de whatsapp suelen sobrar si son muchísimos, dos o tres no molestan y se acompasan con la realidad, pero que a veces tengas que releerlo dos veces... (¡nos hacéis sufrir a los lectores! :( </3).
Por lo demás, había situaciones que me habían parecido muy reales, la constante sensación de una historia agridulce (valga la redundancia) estaba siempre ahí, y bien logrado. También me gustó que no se le diera tanta importancia al amor, descubriendo ambas historias con voces diferentes. El final, a decir verdad, no me lo esperaba demasiado, y es muy fuerte y desgarrador.
Le doy 3 tinteros a Bittersweet, por ser una historia que te hace querer saber más y más y no perder nunca esa atmósfera deprimente recubierta de algún que otro momento dulce.
Bittersweet | MELANIE ROSTOCK
Título: Bittersweet
Autor: Melanie Rostock
Editorial: Plataforma NeoAño: 2016
ISBN: 978-84-16620-34-0
Páginas: 398
Precio: 16,90€
"Cuando has probado lo amargo, lo dulce sabe mejor.
Bambi sabe qué es ser diferente, incluso su nombre lo es. Sabe qué es sentirse despreciada todos los días por sus compañeros de instituto y no poder hacer nada para cambiarlo. Pero la escritura le da la fuerza que necesita para seguir adelante, porque tiene la certeza de que es buena en algo. Liam nunca ha tenido una familia normal, y no solo por los problemas económicos. Su padre es agresivo y bebe más de la cuenta, y su madre no quiere ver la realidad. El futuro no parece esconder muchas opciones para alguien como él, aunque en secreto sueña con convertirse en escritor. Cuando Bambi y Liam se conocen en un taller de escritura, pronto se dan cuenta de que la literatura los une más allá de los libros. Ambos comparten aquello que los salva de caer al vacío, pese a que ella procede de una familia acomodada y él es un chico de barrio. Pero, cuando se trata de amor, pertenecer a mundos opuestos a veces es un obstáculo insuperable..."
La vida de Bambi Peterson es un tormento día tras día. Sabe con total seguridad que sus compañeros de clase a la mínima buscarán cualquier excusa para atacarla, ya sea física o psicólogicamente. Al menos no está sola en esta jungla llena de hienas, cuenta con Connie Clark, una chica con la que también se ensañan sin parpadear. Ya de por sí, Connie tiene muchos complejos, y le da miedo compartir y subir a las redes sociales vídeos suyos haciendo algo que le gusta y cree dominar: cantar.
Fuera del instituto, Bambi tiene a Liam Tucker, un seductor que reside en un barrio marginal pero con alma sensible, en especial a la hora de escribir. Ambos se conocieron en un taller de escritura (del que dentro de la novela nunca han estado, supongo que en Bittersweet: The Beginning es donde muestra cómo estos dos personajes se conocieron) y ahora son grandes amigos, se muestran lo que han escrito, quedan de vez en cuando, piden opiniones el uno al otro acerca de cómo creen que pueden mejorar...
En casa, Bambi se siente abandonada por sus padres porque éstos tienen trabajos a los que dedican mucho tiempo. Marlene es la directora de una importante revista de moda, y a veces según cómo la describía Bambi, parecía un calco de Miranda Priestly en El diablo viste de Prada. El padre de Bambi es informático y está viajando constantemente de un lado a otro. Con la única que parece poder contar es con Berta, la divertida asistenta y consejera de Bambi, quien parece que hace las veces de madre, pero quien le dice a Bambi que debería darle una tregua a su madre y no juzgarla tanto.
La vida de Liam no es un camino de rosas: apenas tienen dinero con el que poder sobrevivir, su madre sufre violencia de género y su padre, aparte de pegarla y maltratarla psicológicamente, se gasta todo el dinero en prostitutas y alcohol. Liam, al no soportar ver que su madre pasa por esta miseria, decide meterse en un negocio tan oscuro que no sabe si saldrá bien parado.
He de decir que Bittersweet, como historia, me ha gustado, pero necesitaré comentar algunas cosas más adelante.
Como reza la sinopsis, pensé que los protagonistas cruzarían sus caminos en el propio taller de escritura, no que ya se conocían y ya son buenos amigos.
La autora quiere tocar muchos temas: bullying, marginalidad, violencia de género, otros problemas familiares... y algunos de ellos no siento que profundice demasiado, quitándoselos de en medio de un plumado, como si nada. Tampoco me gusta demasiado una cosa que hace la protagonista al final; imagino que en su caso lo hace por más miedo al bullying y al rechazo, pero aún así es traicionarse a sí misma, a su amiga Connie y a sus valores.
Sobre los personajes, he de decir que apenas he sentido nada por ninguno. Bambi no me ha llamado absolutamente nada la atención. Era una niña que no se consideraba pija pero era pija, que no sabe si quiere estudiar, pero lo único que quiere hacer es escribir. Liam era más auténtico que Bambi, aunque tampoco sabría decir algo que me guste de él, e incluso a veces me resultaba muy pesado con sus constantes comentarios salidos de tono. Connie estaba atrapada en sus miedos e inseguridades, era devastador como se sentía, pero tampoco me caló.
Sobre la ubicación geográfica de la trama, no sé aún nada, sólo se intuye que son angloparlantes y que viven en una ciudad grande porque tienen metro. En mi opinión, los mensajes de whatsapp suelen sobrar si son muchísimos, dos o tres no molestan y se acompasan con la realidad, pero que a veces tengas que releerlo dos veces... (¡nos hacéis sufrir a los lectores! :( </3).
Por lo demás, había situaciones que me habían parecido muy reales, la constante sensación de una historia agridulce (valga la redundancia) estaba siempre ahí, y bien logrado. También me gustó que no se le diera tanta importancia al amor, descubriendo ambas historias con voces diferentes. El final, a decir verdad, no me lo esperaba demasiado, y es muy fuerte y desgarrador.
Le doy 3 tinteros a Bittersweet, por ser una historia que te hace querer saber más y más y no perder nunca esa atmósfera deprimente recubierta de algún que otro momento dulce.
~ Laura B.
Tiene buena pinta, lo apuntaré para futuras lecturas.
ResponderEliminarNos leemos, besos :)