Siete hermanas

Esta película fue estrenada el 18 de agosto en Inglaterra a través de la plataforma de Netflix, dirigida por Tommy Wirkola y se estrenará en España el 1 de Marzo de este año durante siete días a siete euros. Aquí podéis comprar las entradas.

Siete hermanas nos sitúa en un futuro cercano, concretamente en el 2043, donde la Tierra se ha convertido en un lugar sobrepoblado y por lo tanto no hay alimento para todos. Para poder paliar esta superpoblación se ha aplicado a estricta política de la Ley de Asignación Filial: donde las familias solo pueden tener un hijo. El resto de hijos se les llevará a un centro de criogenización para que cuando el problema se haya solucionado puedan disfrutar su vida plena.

Una mujer llamada Karen Setterman (Noomi Rapace) da a luz a siete niñas, pero durante el parto fallece, pudiendo quedar a la merced de la Ley de Asignación Filial. Esto no llega a suceder, porque el padre de Karen Setterman, Terrence Setterman (Willem Dafoe) idea un plan para que las siete nietas puedan vivir todas juntas. A cada una de ellas las nombra como un día de la semana, y cada una de ellas podrá salir su propio día de la semana encarnando a una figura común: a Karen Setterman.

Después de treinta años, y de grandes sacrificios, Karen Setterman se encuentra trabajando en el banco de la ciudad y en un buen cargo; pero un día, Lunes, la primogénita de las siete hermanas desaparece sin dejar rastro. El restante de las seis hermanas tendrá que ingeniárselas para saber dónde se encuentra la mayor y qué es lo que le ha sucedido sin que el Gobierno descubra quienes son en realidad.

Esta película pseudo-futurista nos plantea un mundo muy posible en poco tiempo. También nos ofrece un dilema ético, lo que el presente puede conllevar y si la familia es tan importante como la supervivencia o más.

La trama no es muy enrevesada, pero al ser un thriller poco a poco te va proporcionando información al mismo tiempo que las hermanas van descubriendo lo que sucede. Al espectador le tiene pegado a la pantalla esperando saber que es lo siguiente que sucederá. Empieza algo lenta, pero va tomando una velocidad vertiginosa gracias a los personajes. 

Con respecto a los actores, destaca Roomi Rapace, quien actuó como la hacker Lisbeth Salander en la entrega de la adaptación de Hombres que odiaban a las mujeres. Rapace hace un excelente trabajo encarnando a siete personas en una misma cinta, con personalidades totalmente diferentes. También cabe mencionar a Glenn Cose encarnando a la antagonista, a Willem Dafoe como Terrence, el abuelo de las siete niñas y a Marwan Kenzari, interpretando a uno de los trabajadores del Gobierno.

Para terminar aunque no sea una de las grandes producciones, es una muy buena película, no solo con la que puedas entretenerte sino que también hace pensar sobre un problema que muy posiblemente tengamos en el futuro.